sábado, 30 de junio de 2012

¿Y quién no duerme
entre abrazos vanos
y extraña la soledad?
Es peor amar de fantasías
a nunca haber amado.



jueves, 28 de junio de 2012

Estás ahí, acurrucada,
pequeña, protegida.
Tienes los ojos cerrados
mientras las hojas caen
y los días nacen.
¿Cómo se siente tanta vida?
Hermoso haz de luz,
saldrás de tu castillo
y romperás en llanto.



Existes

Existes profeta,
en la ingenuidad y la palabra.
Existes donde te encuentro,
dichoso de lo antaño.
Pero así,
existes hermoso y dulce
desde el alma a la garganta.
En las reminiscencias
de mis cenizas y
de fantasías rasgadas.


"Cinco minutos alcanzan para soñar toda una vida,
así de relativo es el tiempo".


Mario Benedetti.







miércoles, 27 de junio de 2012

Es vacío el invierno
si no te pienso.
Y si te pienso, me ahogo
y desato huracanes.
Tu sombra
se encarnece en mi frente
y tremolo el delirio
de extrañarte.



Y si la noche muere,
te vas.
Y si yo muero con ella,
igual.
Aunque mis manos sucumban
tus pieles de rabia,
te vas.
Aunque selle en tu pelo
un beso desesperado.
Muere la noche,
muero con ella.
Y te vas.


martes, 26 de junio de 2012

Me retuerzo de zozobra
en un rincón de mi cama.

Se me estremecen los órganos
por querer decir, lo que no hago.

Por querer gritar y suicidar
tu mirada y mi ego sagrado.



No sé si sentirme halagada, no sé.
Porque de tanto que siento me pierdo.
Mareada.
Tejes y atas. Conectas y espantas.
Taciturno capricornio,
estructuras y diagramas.



lunes, 25 de junio de 2012

Somos dos cuerpos nocturnos,
soledades ancladas de ira.
Somo tu sexo y el mío,
estallando radiantes de orgasmos.
Enredados en remolinos
que nos elevan y se van.
No somos más que el carnal refugio.
No somos más que la triste soledad.


No duermo.
Entre minutos y horas,
me enojo y me engaño.

Me reconcilio con el sol,
soslayando al rencor
que pide a gritos mis manos.

No duermo.
En la taciturna madrugada,
tejo redes de luna y miel.

No duermo.
Y el llanto,
se hace dueño de la luz,
y me enojo y me engaño.



¿Qué harás con tu miedo, incrédulo?
Vuelve tu miedo un círculo y viento,
y vuelve ese viento en palabra.
Rodea mi ironía que empuja
con tus párpados agónicos de rabia.

Y has tuyo tu miedo.
Y has nuestro el derecho,
de creernos después de las noches,
de amar más allá del tiempo.




Me encontraste,
allí, donde tenía que estar.
Te miré
y corrompí tus mandatos.
El universo conspira
y está de mi lado.



Mis palabras,
que no quiero decir.
Mis palabras,
que son tuyas 
desde un principio
y hasta el final de las horas.
Mis palabras, nerviosas
chocan con tu espalda
arqueada por la lujuria,
perfecta y erizada.
Mis palabras, como agujas
cosen el lienzo en la mañana.
¡Por dios!
Que sean tuyas,
mi boca y mis palabras.



sábado, 23 de junio de 2012

Llevo pensando mis hombros
por el sendero hostil de lo llano.

Llevo un desgano de costumbre
y una mirada de transporte.

Al llegar a la frontera de tu luna,
te presento mis sonrisas dejadas.

Y reviento de orquídeas
y compro un alma al diablo.







viernes, 22 de junio de 2012

En las sábanas del ego,
soy tu mejor amante.
Como la luz ambigua
que advierte y tranquiliza.
Existir en esta noche,
es sólo eso.
Existir desde la nada.
Y sufrir. 
Y morir de aburrimiento
en tus sábanas 
blancas de nada.



jueves, 21 de junio de 2012

No existen limitaciones
de tiempo, edad o espacio.
El único que impone límites
es el miedo.
Aquel que teme no puede
amar, ni volar, ni soñar.
Aquel que teme
no goza entre algodones.
Aquel que teme
no ve más allá de las noches.
El temerario, transgrede.
El temeroso, se impone.



miércoles, 20 de junio de 2012

Tu voz y el desvelo.
La última palabra
se desprende rebelde.
Me abraza de manantiales
y me envuelve.
No quieres que sea mía.
Pero me aferro sonriendo
a su empuñadura.
La palabra egoísta, supura.



En silencio,
tu sombra y mi sombra
se miran absortas.
Celosas del roce
de nuestros cuerpos,
esperan con ansias la luz.
Quisieran ser carne y fuego,
quisieran tocarse
y fundirse en el misterio.
Sugerir al hielo que avance.
Convertir la noche en azulejos.
Corrompidas por la envidia
las sombras, nuestras sombras.
No saben decir amor...




Furtivos

Y las sienes heladas de llanto.
Y el amor que juega a los miedos.
Y tu voz. Y el silencio.
Y el efímero descubrir y el agujero,
por donde escapan los amantes
hartos del desapego.


A verte

A verte.
Detrás del cielo y del espanto.
Susurra el viento una canción de cuna,
la melodía muerta del encanto.
A verte.
Como flotando.
Alma perdida de años lejanos,
regalas cuchillos, cosechas llantos.
A verte.
Detrás del todo. Detrás del oro.
Detrás del tiempo que avanza esclavo.



La burla del espejo

Mi reflejo se burla en el espejo
y no encuentro la llave del olvido.
En el vicio del rencor caigo rendida,
como si odiando a la muerte
pudiera volverte una flor.



El tiempo no existe

Mis yemas como puntas arremeten,
incesantes astillan la noche en vela.
Temeraria quiero frenar el tiempo.
¡Ilusa! El tiempo que no existe,
el tiempo que se hace sangre
y escapa por las grietas de mi cuerpo.


martes, 19 de junio de 2012

Con mis manos

Con mis manos
desenmascaro.
Con mis manos,
digo y tiemblo.
Pregunto a tu piel
erguida en un altar
de pianos y violines.
Y hago y deshago,
y entierro y profano.
Con mis manos
soy y miento.